
Dicen que tras la tempestad llega la calma. Puede ser, pero solo si esperas lo suficiente. Hay tempestades que duran cinco minutos y otras que duran toda una vida. Al final acaban, pero si no estás para verlo, la tempestad resultó eterna. Existe la creencia generalizada de que ‘muerto’ el Pedro se acabó la rabia, de que el problema de todo es Sánchez y de que, una vez caiga, se habrá terminado el mal para siempre. Es un error. Detrás de Sánchez vendrá otro peor, como detrás de Chávez vino Maduro, detrás de Lenin vino Stalin, detrás de la URSS vino Putin y detrás de Kim Jong-il vino Kim Jong-un.
(Este extracto forma parte de un texto que se publicó originalmente en ABC el 26 febrero de 2024. Al ser contenido premium, solo puede ser leído íntegramente aquí).