
iecinueve minutos aguantó esta vez Sánchez en el Congreso, desde donde se fue, supongo que sin escalas intermedias, al décimo aniversario de la coronación de Felipe VI. Eligió el presidente para la ocasión una corbata de funeral, no sé si por la muerte ‘fake’ de Noam Chomsky o por la de la república. En cualquier caso, durante ese cuarto de hora largo en el que se dignó a compartir espacio con el resto de los mortales, nada reseñable. En realidad, no hubo nada especialmente reseñable en toda la sesión de control, exceptuando la confirmación de ese ambiente semivacacional y esa relajación postelectoral inauguradas hace siete días.
(Este es el primer párrafo de un texto que se publicó originalmente en ABC el 20 de junio de 2024. Al ser contenido premium, solo puede ser leído íntegramente aquí. Si no se han suscrito, les animo a que lo hagan. La suscripción es muy barata a cambio de muchísimo y necesitamos más que nunca prensa libre).