No sé si verlos con el puño en alto cantando la Internacional causa más vergüenza ajena o más perplejidad. A mí, desde luego, vergüenza. Aunque entendería que a algunas de las víctimas del bando rojo en la Guerra Civil les pueda causar miedo ver a esta gente haciendo el cafre en ‘prime time’, con esa excitación psicopática y enfermiza. No entiendo cómo puede haber en pleno siglo XXI gente aparentemente normal haciendo apología de la barbarie o mostrando símbolos preconstitucionales y antidemocráticos, como es el caso. Supongo que la Fiscalía de Memoria Histórica actuará de oficio contra el PSOE por lo sucedido. Al fin y al cabo, la ley que regula la cosa dice que «se trata de articular una respuesta del Estado para asumir los hechos del pasado en su integridad, rehabilitando la memoria de las víctimas, reparando los daños causados y evitando la repetición de enfrentamientos y cualquier justificación de violencia política o regímenes totalitarios». Si por mí fuera, y siguiendo la estricta literalidad de la ley, podrían empezar por la dirección del PSOE.

(Este es el primer párrafo de un texto que se publicó originalmente en ABC el 2 de diciembre de 2024. Al ser contenido premium, solo puede ser leído íntegramente aquí. Si no se han suscrito, les animo a que lo hagan. La suscripción es muy barata a cambio de muchísimo y necesitamos más que nunca prensa libre).