Antes, los abajofirmantes cantaban «solo le pido a Dios que el engaño no me sea indiferente. Si un traidor puede más que unos cuantos, que esos cuantos no lo olviden fácilmente». Hoy, en un curioso giro de los acontecimientos, a los abajofirmantes el engaño no solo les resulta indiferente, sino pertinente. Tanto que se ponen de parte del traidor y les dicen a ‘esos cuantos’ que no sean fachas. Quizá por eso Ana Belén ha publicado un nuevo disco, que se llama ‘Vengo con los ojos nuevos’: ha pasado de luchar por la democracia a luchar por el PSOE; ha pasado de la camisa blanca de su esperanza a la sucia de su cinismo. Viene con los ojos nuevos, sí. Pero con los mismos cojonazos de siempre.

(Este párrafo forma parte de un texto que se publicó originalmente en ABC el 26 de julio de 2025. Al ser contenido premium, solo puede ser leído íntegramente aquí. Si no se han suscrito, les animo a que lo hagan. La suscripción es muy barata a cambio de muchísimo y necesitamos más que nunca prensa libre).